
Escribe: Manuel de Jesús Acosta Delgado
Coordinador del Boletín Sociedades
Fuente: http://www.muycomputer.com
Se ha vuelto de moda y mucha literatura se puede encontrar en Internet sobre este tema. Si bien la palabra «metaverso» no tiene una definición en el Diccionario de la RAE (1), hoy cada vez más personas hablan de ella y coinciden en señalar que se trata de un entorno virtual donde las personas podemos interactuar con otras introducidos en dicho ambiente (inmersión virtual). Sería el siguiente paso de la interacción en Internet.
En un reciente artículo publicado en la BBC Mundo, se señalaba que el metaverso es un mundo virtual donde lo real y digital se integran utilizando tecnologías como la realidad virtual y la realidad aumentada al que se podría acceder mediante gafas de realidad aumentada y aplicaciones en teléfonos inteligentes donde la interacción de las personas se realizarían a través de avatares digitales (Tzanidis, párr. 9). Hoy existen ejemplos de estos como The Sandbox que es una plataforma de juegos virtuales (2) o Decentraland donde se puede incluso comprar terrenos digitales.
Así como ocurre en nuestros días, en que cada quien cuenta con un usuario y contraseña en alguna red social que la maneja desde un Smartphone para interactuar con familiares, amigos, seguidores, estudiantes, maestros, empresas, instituciones públicas o privadas, etc., es muy posible que dentro de pocos años sea muy común que nos interrelacionemos con nuestro avatar (3) personal con unas gafas de realidad virtual en diversos metaversos donde nos encontremos adscritos. No será extraño decir: «Nos vemos mañana en la reunión anual en el metaverso de la empresa» o «No lleguen tarde al matrimonio en el metaverso de la parroquia de la ciudad». Sin duda, sus usos no tienen límites y queriendo o no, deberemos contar con nuestro avatar personal. Será una nueva forma de participar en el proceso de colonización de nuevos mundos, pero esta vez, virtuales.
El concepto de metaverso será el nuevo nivel de experiencia en el uso del Internet y en el que las grandes firmas tecnológicas están apostando. Facebook cambió de nombre a «Meta» —no es una simple casualidad—. Es probable que su empleo sea tan masivo —por lo novedoso y parecido a la realidad— que genere un cambio sustancial en la forma en que interactuamos especialmente en las formas en que intercambiamos bienes y servicios, así el uso de las criptomonedas —muy usadas en los metaversos— será tan necesario como lo es el uso de la tarjeta de crédito.
Como en cualquier interacción humana, la confianza será necesaria para que su uso sea masivo. Como alguna vez escuché: «La confianza no admite grados». Por ello los metaversos deberán de dotar la mayor de las seguridades contra los usos ilegales de los mismos, como puede ser los fraudes, el lavado de dinero, el terrorismo cibernético, etc. Estos son algunos de los retos que tienen que ser superados por los especialistas en estas tecnologías.
Hoy ya existen metaversos y el Derecho, como en toda interacción humana, también tiene y tendrá algún rol importante para acompañar el proceso. No es casualidad ver en el mercado más cursos o eventos relacionados a la tecnología Blockchain, Fintech, etc. Debemos estar preparados.
Notas
(1) https://dle.rae.es/metaverso
(2) https://www.sandbox.game/en/
(3) «4. m. Inform. Representación gráfica de la identidad virtual de un usuario en entornos digitales.». Consúltese: https://dle.rae.es/avatar?m=form
Avatar según el Diccionario Oxford Languages significa: «Identidad virtual que escoge el usuario de una computadora o de un videojuego para que lo represente en una aplicación o sitio web.».
Referencias
Tzanidis, Theo. 2022. «Metaverso: por qué hay compañías que están gastando millones comprando terrenos virtuales». 12 de enero. Acceso el 30 de enero de 2022. https://www.bbc.com/mundo/noticias-59943794